Un navegador web es un software que permite a los usuarios acceder y navegar por internet. Es él quien nos permite entrar en una página de internet desde nuestro teléfono móvil, tablet u ordenador. Es nuestro portal a internet.

Para nosotros, empresas que nos dedicamos a las soluciones digitales, los navegadores web representan una parte importante de nuestro día a día pues estos softwares son el soporte en el que vemos reflejados nuestro trabajo. En servicios como Mantenimiento Web, Desarrollo de Páginas Web, Diseño Web o Desarrollo de Tiendas Online.

Los navegadores de los que vamos a hablar aquí representan el 90 % de la cuota global del mercado de los navegadores. O, dicho de otra manera: de cada diez personas, nueve utilizan uno de estos cuatro navegadores.

¿Por qué? Pues porque responden de manera muy positiva a algunos factores como: su velocidad de carga, velocidad de conexión a internet, la cantidad de recursos que el navegador necesita, sus protecciones de seguridad y privacidad, lo intuitivo que resulte al usuario, herramientas de navegación que proporciona, etc. etc.

Google Chrome: es uno de los navegadores más populares y utilizados. Y es que en 2002 aparecía en dos tercios de la cuota global en todos los dispositivos. Este navegador se incluye en ordenadores, teléfonos móviles y tablets. Google Chrome es rápido, gratuito, seguro, ligero, atractivo e intuitivo y cuenta con una amplia gama de extensiones que nos hacen la navegación más fácil.

Mozilla Firefox: este navegador destaca por su enfoque en la privacidad y la seguridad ya que es de código abierto: puede ser inspeccionado por cualquiera para comprobar que todo esté en orden. Es muy parecido a Chrome en cuanto a que es personalizable y cuenta con extensiones. Algo a tener en cuenta: como tiene más años que Chrome, algunas web, también antiguas, funcionan mejor en Firefox.

Safari: es el navegador web predeterminado en los dispositivos Apple: Macs y iPhones. Es rápido y muy seguro pues bloquea todas las cookies de terceros de forma predeterminada, para evitar la recopilación de datos para su uso en campañas publicitarias y de marketing. Además, es altamente compatible con los sitios web y aplicaciones de Apple. Eso sí, no cuenta con tanta personalización ni extensiones.

Microsoft Edge: es el navegador web predeterminado en Windows 10. Sustituyó al longevo Internet Explorer. También es un navegador rápido, seguro y compatible con muchas extensiones de Chrome. Cuenta con una interfaz fácil de manejar e intuitiva. En cada actualización trae consigo interesantes mejoras. Es posible que sea el más parecido a Google Chrome en cuanto a características.